
Hoy he leído las preguntas y conclusiones que sacan algunos medios sobre estas "casualidades" y que dan mucho en que pensar:
- Los “errores” sólo se producen en 2005 y 2006, las fechas en que Urdangarín contrató la reforma de la casa de Pedralbes: Pese a que –según Hacienda- es un fallo “aleatorio” y pese a que se han revisado las cuentas desde el año 2002, no se ha detectado ninguna equivocación ni en 2002, ni en 2003, ni en 2004. Hacienda no supo explicar por qué 13 “defectos” se concentraron sólo en los dos años y no en los cuatro anteriores también analizados. Casualmente, los años 2005 y 2006 son aquellos en los que el matrimonio hacía frente a los pagos por las reformas en la Casa de Pedralbes.
- De igual forma, los errores se concentran en cuatro despachos notariales. Hacienda asegura que maneja “1.000 millones de datos de terceros”. Por eso, concluye, el error puede ser general. Curiosamente, el yerro no se repitió más que en despachos muy localizados de Alicante, Almagro y Pilar de la Horadada sin que ningún otro bufete del resto del país incurriera en el mismo fallo.
- El dinero atribuido a la Infanta coincide con el dinero presupuestado para la primera reforma de Urdangarín: Iñaki Urdangarín obtuvo un presupuesto de la prestigiosa firma “Grupo Levante” por una cuantía de 1.376.304 euros. Las operaciones atribuidas a la Infanta suponían una cifra muy similar a esa: 1,43 millones de euros. Es otra coincidencia sobre la que Hacienda no se pronuncia.
- La cuarta y última casualidad se extiende durante 8 años. Desde 2005 –cuando se produce la primera inscripción —hasta 2013 –cuando se envía la documentación al juez—Hacienda no parece haber sometido a la Infanta a ninguna inspección tributaria. Durante 8 años no se detectó el error.

¿Da que pensar -mal- o no?
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