
Es una cuestión casi simbólica pero también un síntoma de que algo se mueve en el mundo municipal y de que la desafección por España está presente más que nunca en las administraciones. Incluso hay consistorios que han cambiado el nomenclátor municipal sustituyendo el nombre de Plaça d’Espanya por el Plaça de la Independència. Toda una declaración de voluntades, que sinceramente sirve para bien poco o nada.
Veremos en qué acaba este tema, me temo que el sueño inalcanzable de muchos catalanes quedará, por el momento, precisamente en eso: en un sueño.
La cantidad exacta de "soñadores" no creo que lleguemos a saberla ya que el cacareado referendum no se llevará a cabo, al menos hasta que reformemos, del todo, la enferma democracia española y desinsectemos de garrapatas y chinches todos los partidos políticos que nos gobiernan y nos chupan la sangre. ¡Ardua labor tenemos por delante!
La cantidad exacta de "soñadores" no creo que lleguemos a saberla ya que el cacareado referendum no se llevará a cabo, al menos hasta que reformemos, del todo, la enferma democracia española y desinsectemos de garrapatas y chinches todos los partidos políticos que nos gobiernan y nos chupan la sangre. ¡Ardua labor tenemos por delante!
Nota: En azul oscuro se señalan los municipios, en más claro las comarcas. ¡Girona se lleva la palma!
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