martes, 2 de abril de 2013

CARADURA ECLESIÁSTICA

Este tema no es nuevo y cada 'x' tiempo salta a la palestra ya que la desvergüenza que muestra la iglesia inmatriculando inmuebles que son del pueblo, clama al cielo y nunca mejor dicho. El artífice de este saqueo no es otro que el ínclito Aznar y sus leyes, que luego y dicho sea de paso Zapatero dejó tal cual.

En Navarra el tema ha vuelto a estar de rabiosa actualidad y los consistorios reunidos en la Comisión de Ayuntamientos de la Plataforma de Defensa del Patrimonio Navarro vuelven a hacer un llamamiento a las entidades locales para reclamar al Arzobispado de Pamplona los bienes que este lleva inscribiendo a su nombre desde el año 1998, en lo que miembros de la plataforma consideran un "auténtico expolio" de patrimonio público y que desde siempre, "el dinero que se ha invertido en la construcción y arreglo de las casas parroquiales o las iglesias del valle ha sido de los pueblos, bien a través de las aportaciones de los vecinos o del trabajo en auzolan".

El 'auzolan' es, como se conoce en Navarra, al trabajo comunitario llevado a cabo por los vecinos y vecinas, en la limpieza de bosques municipales o la recogida de leña, pero también de la restauración de las casas de las hacedoras, el mantenimiento de cementerios o la construcción de muchas ermitas navarras.

Pues todo ese trabajo comunitario pasa a ser patrimonio de la iglesia por 25/30 euros, que es el coste de inscribirlos en el Registro de la Propiedad. De esta forma se han adjudicado desde plazas mayores, a casas de maestras o lo que les ha venido en gana y no estaba previamente registrado. 
No olvidemos que a estos 'santos benefactores de si mismos' les entregamos más de 12.000 millones de euros cada año para que luego se queden con terrenos y edificios que no son suyos.
Caridad cristiana, llámase a esta figura.

No hay comentarios: